Hola buenos días,
Desde la organización de la Salsa Gala, me gustaría comentar
que existe un problema que entre todos podemos solucionar…desde hace tiempo
notamos que la renovación y el crecimiento de la “salsa escena de Tenerife” ha
ido menguando, y creo que con un pequeño cambio de actitud por nuestra parte,
como bailadores, podríamos hacer que mucha gente disfrutase de lo que nosotros
sentimos. Creo que si todos los chicos y chicas que saben bailar a un buen
nivel, sacásemos a los iniciados e incluso a personas que no conocemos que
bailan bien, el círculo se ampliaría…de otra manera esto se convertiría, de
aquí al próximo año en un coto cerrado.
Por otro lado, me gustaría retomar cosas que nos unían como
podría ser los cumpleaños, en mis tiempos no mirábamos si conocíamos a esa
persona ni mucho menos, nos acercábamos al círculo y supiese mucho o poco bailábamos
con ella, cosa que provocaba que sus amigos o acompañantes pasasen a ser nuevos
amigos.
No pido que se haga toda la noche, ni siquiera es una
obligación…piensen que es bailar muy muy
bien pero siempre con la misma gente? Acaso no nos perdemos gente genial que
está esperando poder compartir en nuestro coto cerrado? O quizás que esa gente que nos mira se rinda a
nuestros pies? (exagerando la pregunta luce más).
Está bien intentar llegar a la mayor cota personal de nivel
con las chicas que conocemos, pero también es bonito guiar a una persona que no
tenga tanta experiencia y divertirte de igual manera.
Cabe destacar que así evitamos que los nuevos talentos se
vayan a casa y es que también me ha llegado a mi conocimiento que existen unos especímenes
que se dedican a corregir en pista con una “actitud de profesional” y con
comentarios un tanto desafortunados…dando una imagen del salsero que NO es…porque
en Tenerife hay calidad como salseros y como personas (quitando esta minoría
desafortunada).
Al leer esto, podréis decir pues hazlo tu Fran, o quien eres
tú para pedir esto?
Sinceramente, solo soy una persona que ve cómo los salseros
se divierten en la pista y veo la barrera que existe en nuestras fiestas para
aquellos que quieren compartir y no saben cómo entrar en nuestro círculo, para
colmo que yo solo tenga esta actitud no terminaría de satisfacer la demanda y atender
a todas esas chicas y sin embargo entre todos, solo significaría unos 4 bailes
y supondría un crecimiento exponencial en amigos que tienen un mismo sentir.
Una última pregunta retórica,
¿Eres feliz cuando bailas? ¿Haces feliz a la persona con la
que bailas? Pues entonces bailemos con todos los que podamos y creemos una pandemia
de felicidad.
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